| Johanna Beckett | |
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| Biografía | |
| Nombre completo | Johanna Beckett |
| Género | Femenino |
| Estado | Muerta |
| Causa de la muerte | Apuñalamiento |
| Asesino | Dick Coonan † |
| Ocupación | Abogada |
| Familia | Jim Beckett (marido) Kate Beckett (hija) Richard Castle (yerno) Martha Rodgers (consuegra) Jackson Hunt (consuegro) |
| Información del personaje | |
Johanna Beckett (4 febrero de 1951 - 9 de enero de 1999) era una abogada de derechos civiles de Nueva York, la esposa de Jim Beckett y la madre de Kate Beckett.
Su violenta muerte fue a consecuencia de investigar la campaña corrupta del senador Bracken y la causa de que su hija decidiera hacerse policía
Vida[]
La vida de Johanna solamente se ha mencionado mediante los recuerdos de su familia y amigos. Se dice que fue una esposa y madre cariñosa. Jim Beckett, recordando su relación con ella a Castle, dijo que tardó años en conseguir que fueran pareja y que lamentaba la cantidad de tiempo que habían perdido. Kate recordó que su frase favorita era: "Te lo dije".
Una joven Kate Beckett con su madre Johanna
En un momento de su vida, Johanna organizó un grupo con la intención de limpiar el peligroso barrio de Washington Heights. Esto provocó la ira del capo de la droga Vulcan Simmons, pero aparentemente Simmons no actuó de manera hostil ante esta amenaza.
El asesinato[]
Johanna era una mujer que sólo se preocupaba por la verdad. En su trabajo con la iniciativa Pro-Justicia, trató de reabrir los casos cerrados y exonerar a los condenados injustamente. Joe Pulgatti contactó con muchos abogados, insistiendo en que había sido acusado del asesinato del agente secreto del FBI Bob Armen muchos años antes. Como mafioso que fue, Pulgatti lo tenía muy difícil para que alguien creyera su historia. Johanna fue la única abogada que respondió a su petición de ayuda.
Pulgatti afirmó que él y Armen habían sido abordados por un grupo de secuestradores desconocidos que se aprovechan de los líderes de la mafia en el momento. Cuando Armen trató de sacar su arma para defender a Pulgatti, los secuestradores le dispararon accidentalmente. El ataque tuvo lugar en un callejón, donde los únicos presentes eran Pulgatti, Armen, y los secuestradores. Más tarde, la policía afirmó que los testigos afirmaban haber visto a Pulgatti en el callejón. Esto llevó a Pulgatti a darse cuenta de que los secuestradores eran los propios policías.
Lo que Johanna no sabía era que se habían descubierto ya los agentes de policía. El por aquel entonces Asistente del Fiscal de Distrito William Bracken, había aprendido acerca de los crímenes de los policías años antes, pero en vez de perseguir el caso, chantajeó a los oficiales para que entregaran el dinero de los rescates obtenidos ilegalmente. Con ese dinero financió su elección a la Cámara de Representantes, y comenzó un ascenso al poder que terminó en el Senado de EE.UU. Ante la posibilidad de re-abrir y resolver el caso Pulgatti con lo que lo perdería todo, Bracken comenzó una campaña masiva para eliminar esta vulnerabilidad. Contrató al asesino a sueldo Dick Coonan para matar a Johanna y a las otras personas involucradas en su investigación.
Coonan mató a Johanna con una sola puñalada en sus riñones, pero siguió acuchillándola para dar la impresión de que había sido asesinada por alguna banda. El cuerpo de Johanna fue encontrado en el mismo callejón donde Bob Armen había recibido un disparo. Después de esto Bracken presionó a John Raglan, el oficial investigador tanto de la muerte de Armen como de la de Johanna, y él mismo en la de los secuestradores, para coroborrar que la muerte de Johanna había sido cosa de bandas.
Después de su muerte[]
La muerte de Johanna afectó profundamente a su familia. Jim Becket, su marido y socio abogado, cayó en el alcoholismo para ahogar sus penas. Sólo después de muchos años, grandes dificultades y el amor y apoyo incondicional de su hija, logró dejar la bebida.
Su hija Kate, entonces una estudiante a punto de empezar derecho en Stanford, abandonó sus sueños de convertirse en abogada y entró en el cuerpo de policia. Kate investigó el casó de su madre obsesivamente, casi hasta el punto de autodestruirse. Muchos de sus compañeros la conocieron en esa época y todos admiraron y a la vez se sintieron afectados por el rumbo que estaba tomando Kate. A pesar de sus mejores esfuerzos, ella no logró ningún avance. Para evitar la caída emocional, abandonó sus intentos de averiguar lo sucedido a su madre y canalizó su dolor en una implacable fijación para conseguir justicia para otros, justo como su madre había hecho.
El primer gran cambio en el caso sucedió cuando Richard Castle, un escritor que la estaba semi-acosando para lograr material que usar en sus novelas, decidió investigar el caso él mismo en secreto. Llamó al doctor Clark Murray, quien descubrió la verdadera causa de la muerte de Johanna y confirmó que fue el ataque de un profesional. Muy reacia, Kate reabrió la investigación. El doctor Murray posteriormente descubrió que un asesinato totalmente desvinculado al de Johanna había sido cometido por el mismo asesino. Esto llevó a Castle y Becket a identificar a Dick Coonan, un asesino a sueldo. Coonan fue asesinado por Kate antes de que pudiera revelar la implicación de Bracken. La obsesión de Kate la llevó a descubrir el hombre que contrató Coonan, forzando a Bracken a contratar a más sicarios e incluso tomar medidas más extremas para protegerse. Sin embargo, Kate eventualmente logró identificarlo y enfrentarse a él, a pesar de no tener todavía pruebas materiales suficientes para arrestarle y lograr una sentencia en su contra. Ella sigue proyectando su propio anhelo de justicia y deseo de emular a su madre en sus otros casos.
Castle organizó la creación de la beca Johanna Becket en su universidad, que proporcionaría todo lo necesario a un estudiante que usara su carrera de derecho para seguir el ejemplo de Johanna y defender a aquellos que normalmente serían ignorados.
En Veritas, después de que Kate fuera culpada del asesinato de Vulcan Simmons, ella y Castle se vieron obligados a huir. Michael Smith, un amigo de Roy Montgomery, los encontró clandestinamente, revelándoles que Bracken estaba buscando un cassette con evidencia de que él ordenó todos los asesinatos, a pesar de que él mismo no creyera en su existencia. Después de escapar por los pelos de los matones de Bracken y recibiendo una contusión, Beckett recordó su primer encuentró con Montgomery, donde él dio a entender que había creado la grabación y se la había dado a su madre. Comprendiendo que debe haber alguna pista en las notas codificadas de su madre, Kate y Castle vuelven a su apartamento para investigarlas otra vez. Mirando las últimas entradas meticulosamente, Castle se da cuenta de que Johanna poseía la grabación y la escondió en un objeto familiar. Después de ser arrestados por un grupo del SWAT y rompiendo el precinto de la 12, Kate localiza la estatuilla de un elefante de su escritorio y recuerda que su madre pensaba en ellos como un símbolo de su familia. Kate lo rompe, revelando la cinta en su interior. Una vez escuchada por el jefe de asuntos internos y la capitana Victoria Gates, la grabación de Bracken ordenando los asesinatos sale a la luz. Kate queda así libre de todos los cargos, detiene a Bracken en directo por la televisión y finalmente logra conseguir justicia para la muerte de su madre Johanna. Castle le dice a Kate que, esté donde esté, su madre estaría muy orgullosa de ella.
Lápida de Johanna Beckett
En su tumba puede leerse "Vincit omnia veritas" ("La verdad lo conquista todo" en latín).
Trivia[]
- Johanna ha sido representada por dos actrices diferentes, siempre en fotografía.